Contar con asesoría legal inmobiliaria garantiza que el proceso de compra sea seguro, transparente y sin riesgos legales. Un abogado especializado verifica la documentación, analiza el estado jurídico del inmueble y protege tus intereses durante la negociación y escrituración.

Una asesoría legal inmobiliaria puede incluir: revisión de escrituras y certificados de tradición, redacción o revisión de contratos de compraventa y arrendamiento, acompañamiento en trámites notariales, verificación de impuestos al día, y representación ante conflictos legales relacionados con el inmueble.

Comprar una propiedad sin asesoría legal puede exponerte a fraudes, compra de inmuebles con embargos, hipotecas no registradas, problemas con sucesiones, litigios en curso o contratos mal redactados. Estos errores pueden representar pérdidas económicas o incluso la pérdida del bien.

Un contrato de arrendamiento legal debe incluir cláusulas claras sobre el canon, duración, obligaciones de las partes, condiciones de terminación, sanciones y normativas vigentes. Es recomendable que un abogado revise el contrato para asegurar su validez jurídica y evitar futuros conflictos.

El costo de una asesoría legal inmobiliaria puede variar según la complejidad del caso, el tipo de servicio (compra, venta, arriendo, sucesión, etc.) y el profesional contratado. Generalmente, las tarifas pueden ir desde $300.000 COP en adelante, dependiendo del alcance de la asesoría.